miércoles, 15 de febrero de 2012

Historia 1.5 Pokémon, Capítulo 41


Capítulo 41: El saber de la Escuela Pokémon.

Jorge y sus amigos abandonaron Isla Ortem poco después de pasar por el gimnasio de Ciudad Ramal. Después de dormir en un ferry, llegaron al puerto de Ciudad Hunan en Isla Cátedra, la cuna de la sabiduría en el archipiélago.
-En el siguiente pueblo hay un gimnasio- informó Hipo escudriñando su guía.
-¿Pues a que esperamos en ir?
-No te lances Jorge- Raúl sujeto a su amigo por el brazo- Primero paremos para almorzar algo.
Cuando se encontraban en las afueras de la ciudad tomando sus bocadillos y sus aperitivos, vieron como un Metagross pasó levitando por encima de ellos.
-¿Eso era un Metagross?
Metagross de Roberto
-<<Metagross Pokémon de tipo Acero-Psíquico. Metagross es un Pokémon tranquilo, pero cuando se le interrumpe de su estado de meditación se vuelve fiero e incontrolable. Es capaz de levitar si recoge sus patas hacia adentro>>
-¡Es impresionante!
-Muchas gracias- Roberto y su inseparable amigo Nuzleaf llegaron al lugar.
-¡Oh! Hola Roberto- Hipo señaló a Metagross con la mano- ¿Ese Metagross es tuyo?
-Sí- Roberto estiró el cuello como signo de superioridad- Estamos trabajando su levitación psíquica.
Jorge no creía que Roberto se hubiera hecho tan fuerte como para capturar un raro y poderoso Metagross- ¿Y cuántas medallas tienes Roberto? Yo acabo de conseguir mi quinta medalla.
-Yo también tengo cinco- Roberto les mostró su estuche- Es más, yo también acabo de conseguir mi quinta medalla.
-Pero las mías están más limpias y relucientes- Jorge sacó las suyas.
-Pues las mías además de brillar como gemas las conseguí en combates muy rápidos- Roberto dio un paso largo hacia Jorge.
-¡Pues mis estrategias son tan buenas que hasta los líderes me felicitan por ellas!- Jorge dio otro paso largo poniéndose cara a cara con Roberto.
-Estos dos ya compiten hasta por cuál de los dos tiene más limpias las medallas- apuntó Hipo mientras Raúl intentaba separarlos.
-¡Te reto a un combate!
-¡No! ¡Yo te reto a ti a un combate!
Los dos salieron corriendo tan rápido que levantaban una nube de polvo a su paso. Hipo, Carla y Raúl intentaron seguirlos.
Colocados a una distancia reglamentaria, Jorge y Roberto iban a disputar su combate en una de las plazas de la ciudad. Como siempre sería Hipo la que arbitrara el combate.
-Será una lucha de tres pokémon, sin límite de tiempo y con sustituciones.
-¡Adelante Corphish!- Roberto casi no dejó que Hipo terminara.
-¡Meditite vamos!
Raúl y Carla se sentaron en el muro de piedra que hacía las funciones de banco.
-¡Corhish Martillazo!
-¡Meditite Puñodinámico!
Ambos contrincantes chocaron con derroche de fuerza. Los dos pokémon sufrieron daños.
-¡Rayo Burbuja Corphish!
-¡Meditite esquivar y Puñodinámico!
-¡Agarre, vamos!- Corphish agarró con su pinza el puño de Meditite- ¡Lánzalo!
Raúl se sorprendió cuanto había progresado aquel pokémon de tipo Agua- Roberto ha mejorado increíblemente. Su Corphish es mucho más fuerte que la última vez.
-Pero Jorge no se ha quedado atrás ni mucho menos, querido.
Cuando los dos pokémon iban a golpear nuevamente al otro, un hombre de unos cincuenta años y vestido de traje corrió hasta los dos entrenadores tirando de ellos.
-¿Pero que hace señor?- Jorge y Roberto se negaban a seguirle por la fuerza.
-Mi nombre es Evaristo y soy el director de la Escuela Pokémon. Os he visto combatir y he pensado que seríais perfectos para que enseñarais a nuestros alumnos vuestra experiencia en combates.
Jorge y los demás aceptaron la petición del Director Evaristo para protagonizar una máster class aunque no aprobaban las formas.
El señor director había reunido a una de las clases en el espacioso patio de la escuela que contaba con dos módulos de clases. Tenía más aspecto de universidad que de escuela de niños.
-¡Guau! ¡Eso es un Meditite!
-¡Y eso otro un Corphish!
-¡A ver! ¡A ver!
Los niños que no llegaba ninguno a los diez años se acercaron corriendo a ver y tocar a los pokémon. Jorge y Roberto los regresaron a las ball porque no eran precisamente los pokémon más amistosos de sus equipos.
-¡Niños, niños!- Evaristo puso orden entre los alumnos- Hoy contamos con Jorge y Roberto, dos expertos entrenadores que viajan por el archipiélago desafiando a los líderes de gimnasio y poder así participar en la Liga Batalla.
Los niños abrían la boca por la sorpresa y no les quitaban ojo a los jóvenes.
Hipo, Carla y Raúl se mantuvieron al margen, comentándolo todo.
-¿No os parece curioso que alaben a estos dos?
-Querida, a los niños les gusta ver hasta un Magikarp.
El señor director retomó la explicación- Algunos de sus pokémon no son nada comunes en la isla mientras que otros han evolucionado.
Jorge y Roberto sacaron sus pokémon y pasaron gran parte de la mañana con los niños explicándoles como son y mostrándoles sus ataques.
-Para lo brutos y competitivos que son, no se les dan mal los niños- indicó Hipo mirando como Jorge y Roberto jugaban con los alumnos y los pokémon.
Lo que más llamaba la atención a los niños eran Tropius y Metagross por su gran tamaño. Se subían y jugaban con ellos alegremente. Todos menos uno. Carla se acercó al niño para saber que le ocurría.
-¿Por qué no juegas con tus amiguitos, querido?
-Es que estoy cuidando algo. Mi Caterpie ahora es diferente. No sé qué le pasa.
Cuando el niño guió a Carla hasta la parte de atrás de la escuela, cerca de la caseta de trastos, pudo comprobar que el niño ya no tenía un Caterpie.
-Lo que ocurre nada. Lo que pasa es que ha evolucionado a Metapod.
-¿Evolucionado?
Metapod del niño
Carla sacó su Pokedex para que el niño lo comprendiera- Este es un Caterpie y este otro un Metapod.
-<<Caterpie pokémon de tipo Bicho. Caterpie es un Pokémon pacífico y no demasiado fuerte, habitualmente no se ve implicado en enfrentamientos con los otros Pokémon de su hábitat. Puede encontrarse en bosques>>
-<<Metapod pokémon de tipo Bicho y evolución de Caterpie. La capa que recubre el cuerpo de Metapod es tan dura como una plancha de hierro. Metapod apenas se mueve. Permanece inmóvil para que las vísceras evolucionen dentro de la coraza que le rodea>>
-¡Que guay!- el niño dio un saldo de la alegría.
-No soy muy experta en pokémon Bicho pero no creo que le falte mucho para evolucionar a Buterrfree, la última evolución de Caterpie.
Entonces fue cuando oyeron una explosión y al resto de niños gritando.
-¡Tengo miedo!- el niño del Metapod abrazó a Carla.
Carla intentó tranquilizar al pequeño- Vamos a hacer una cosa. Coge a tu Metapod y no lo sueltes. Mantente todo el rato detrás de mí. ¿Entendido, querido?
-Sí- el niño obedeció a Carla y se escondió tras la coordinadora.
Cuando regresaron a la parte delantera vieron como un Tyranitar metalizado cogía a los pokémon y los metía en el compartimento de su panza. Evidentemente todo era causa de Santi y su intención de robar.
Jorge y Roberto intentaban hacer frente a la gigantesca máquina mientras el señor Director, la profesora, Raúl e Hipo conducían al resto de niños a la calle.
-¡Tropius Rayo Solar!
El macarra soltó una gran carcajada- Con esta máquina no vais a poder. Está más que mejorada. ¡Adelante brazo!
La mano mecánica sujetó a Tropius.
-¡Metagross Puño Meteoro!- la orden de Roberto provocó que el brazo robotizado estallara en mil pedazos y Tropius estuviera liberado.
-Gracias Roberto.
-No me hagáis reír- Santi presionó un gran botón rojo. Una red electrificada atrapó a Tropius y a Metagross.
-¡No!
-¡Por fin me hice con la mía! ¡Soy el mejor ladrón del mundo!
Carla, que era la única que quedaba junto con el niño no sabía si ayudar a sus amigos. Si sacaba un pokémon se delataría y el niño podría estar en peligro.
-¿Qué pasa?- el niño no soltó en ningún momento a su pokémon, aun estando brillando.
-Está evolucionando.
La coraza de Metapod se rompió y un majestuoso Butterfree alzó el vuelo.
Butterfree del niño.

Jorge le apuntó con su Pokédex- <<Butterfree pokémon de tipo Bicho-Volador y evolución de Metapod. Butterfree tiene una habilidad especial para encontrar delicioso polen en las flores. Puede localizar, extraer y transportar polen de flores que estén floreciendo a 10 km de distancia de su nido>>

Santi se percató del pokémon volador- ¡Vaya! Pero si todavía me queda uno.
-¡Butterfree!- Carla sujetó al niño para que no saliera corriendo.
El joven Butterfree usó su ataque Paralizador sobre el Tyranitar de metal. La fina capa de paralizador entró por todos lados, dejando la maquina inservible y a Santi inmóvil.
-Metagross Garra Metal- el pokémon de Roberto obedeció y rompió la red que le apresaba a él y a Tropius.
-¡Tropius Hoja Mágica!- con este ataque ordenado por Jorge se creó un boquete en la tripa de la máquina. Todos los pokémon salieron- ¡Terminemos esto con un Rayo Solar!
Con la maquina totalmente destruida y con Santi fuera de la ciudad, nuestros amigos retomaron sus juegos en la escuela y comenzaron a preparar la comida.
El niño del Butterfree abrazó fuertemente a Carla- ¡Muchas gracias!
-¿Gracias? ¿Y a qué se debe, querido?
-Tú has hecho que mi Metapod evolucionara a Butterfree.
-No lo hice yo, querido. Lo que ocurrió es que tu pokémon estaba preparado para evolucionar y así salvar los pokémon de mis amigos. Ahora debes recordar cuidar muy bien a Butterfree para cuando seas un entrenador poder utilizarlo en combates.
-¡Claro que lo haré señora!
-Lo de señora sobraba…- pensó Carla sintiéndose mayor con ese término- Niños…

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