Enlace a Capítulo 3
Capítulo 4: Dos nuevos fichajes en un mar de malas personas.
Jorge e Hipotenusa retomaron el camino después de despedirse de
Juan y de su padre Jaime. En este momento estaban cerca de un túnel llamado
Cueva Magma.
-¿Sabes dónde está el próximo gimnasio Hipo?
-Sí, en Ciudad Aguamarina. Pueblo Incienso está al otro lado de
este túnel. Tendremos que cruzar ambos para llegar al gimnasio.
De repente, una pequeña corriente eléctrica recorrió el cuerpo de
Jorge.
-¿Qué pasa Hipo?- Jorge no podía mover ni un musculo.
-Es un Minun, creo que nos ve como una amenaza.
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| Minun salvaje |
-<<Minun pokémon de tipo Eléctrico. Minun es un Pokémon que anima. Durante la lluvia, se esconde bajo los tejados de
las casas, porque odia el agua>>
-¿Y puedes hacer algo o me voy a quedar así para siempre?
-Sí, ¡voy a capturarlo!- una gran ilusión recorrió el cuerpo de
Hipo- ¡Qué ilusión! Adelante Elekid.
Minun salió de entre los arbustos y cubrió su cuerpo de
electricidad y fue directamente a por él atacando con Chispa. Elekid lo frenó
con su brazo.
-Elekid Puño Trueno.
El pequeño pokémon cayó entre unos arbustos bajos. Asomó la cabeza
y enfadado lanzó un Onda Voltio que alcanzó a todos los presentes.
-¡Eso sí que ha sido potente!- Hipo dio un salto de la alegría
aunque tenía el pelo encrespado- Vamos Elekid, enséñale tu Rayo.
Minun lo esquivó y el ataque de Elekid hizo un agujero en el terreno. A continuación golpeó
a Elekid a gran velocidad con Ataque Rápido.
-Levanta Elekid. Usa Rayo, una vez más.
El pequeño pokémon corrió como una bala entre los árboles de la
zona. Cuando Elekid hubo parado, le golpeó con un nuevo Chispa. Hipo comenzó a
tirarse de los pelos de la desesperación.
-Creo que deberías debilitarlo un poco más antes de lanzar la
ball.
-¡Encima no te cachondés de mí! ¡Elekid Rapidez a máxima potencia!
Con un
movimiento rápido de sus manos, Elekid envió un centeneras de estrellas que
alcanzaron a Minun como si se tratasen de meteoritos. Era el momento idóneo
para lanzar la ball.
Hipo sacó una de su mochila y la lanzó con un giro de muñeca -
¡Adelante poké ball!
El aparato esférico le golpéo en la cabeza a Mimum y lo atrapó.
Todavía quedaba la duda de que se quedara dentro o no.
-Vamos, vamos…- Hipo se mordíó las uñas hasta que la luz
indicadora se apagó- ¡Sí! ¡Minun es mío!
-Enhorabuena- la parálisis de Jorge ya había remitido y se acercó
a Hipo aunque con algún tic todavía- Ese Minun tiene mucha energía.
-¡Tienes toda la razón! Que alegría volver a sentir esto de
capturar un pokémon.
-Lo dices como si fueras una novata.
Después de que Hipotenusa capturara este escurridizo Minun, los dos
jóvenes entrenadores se adentraron en la Cueva Magma. Como su propio nombre
indica, la Cueva Magma es famosa por ser la cuna de muchos pokémon de tipo
Fuego. La roca era muy similar a la volcánica al tacto y en aspecto. En el
ambiente había un cierto humillo producido por los pokémon del lugar.
-Vaya, vaya. Volvemos a encontrarnos.
-¿Quién es? ¿Le conoces Jorge?
-Sí…, se trata de un macarra que quiso molestar al Profesor
Galache obligándole a hacer lo que él quería- respondió el joven recordando
perfectamente a aquel maleducado y estrafalario señor.
-Como tergiversas las cosas renacuajo. Yo solo pretendía dejar
alguno de mis pokémon allí. Hoy me siento mazo bien y seguro que esta vez parto
con la pana. Adelante Combusken- el macarra lanzó la ball sin más demora dando
por sentado que Jorge reaccionaría.
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| Combusken del macarra |
-<<Combusken Pokémon de tipo Fuego-Lucha y evolución de Torchic. Combusken batalla con las llamas que escupe de su pico y
con consecutivas patadas demoledoras>>
Jorge tomó una de sus ball- Vamos Pidgey. Golpéale con Ataque Ala.
-Combusken salta y Doble Patada.
Pidgey fue lanzado contra las rocas de color cobrizo oscuro de las
paredes de la cueva con aquella patada seguida de otra.
-¿Estás bien Pidgey?- el pokémon pájaro alzó el vuelo rápidamente-
Muy bien, Ataque Rápido- ahora fue Combusken el que lo pasó mal ya que Pidgey
fue tan rápido como el rayo- ¡Genial Pidgey! Remátale con Tornado.
-¡Eso más que un remolino parece un huracán!- Hipo no se creía el
poder que tenía aquel pajarillo. Se afanó en sujetarse el pelo.
-¡Vuelve Combusken! ¿Que te ha pasado? ¡Larvitar adelante! Tú no
me puedes fallar.
-Descansa Pidgey. Adelante Vigoroth, te toca a ti.
-Larvitar Avalancha.
Larvitar levantó unas gigantescas rocas de la cueva como si fueran
bolas de papel y se las comenzó a lanzar a su contrincante.
-Vigoroth Puño Certero para romperlas todas.
-¡Buena estrategia Jorge!- Hipo aprobó la rápida táctica de Jorge-
Sigue así.
-Golpes Furia- la sucesiva serie de puñetazos y garrazos de
Vigoroth aturdieron un poco a Larvitar.
-¡Reacciona! ¡A este paso nos ganan! Usa Tormenta Arena.
-¡Ah!- Jorge, Vigoroth e Hipo tuvieron que cubrirse la cara tras
aquella ráfaga de arena.
-Esta es la nuestra. ¡Larvitar Golpe!
Vigoroth no pudo eludirlo porque estaba cegado con la arena. El
aterrizaje en la roca fue muy doloroso.
-Vuelve Vigoroth. Adelante Spheal, confío en ti. Pistola Agua- el
chapuzón dejó a Larvitar seriamente perjudicado. Se sacudió y atacó una vez más
con Golpe- Spheal rueda por el suelo y Nieve Polvo- el pokémon del macarra terminó
hecho un cubito de hielo- Ahora sí Spheal. ¡Bola Hielo!- tras coger carrerilla
y cubrirse de escarcha el cuerpo, Spheal destruyó a Larvitar- Te he debilitado
otro.
-¡Muy gracioso! ¡Vuelve Larvitar!- el macarra no le había gustado
perder otro pokemon- Con este pokémon que acabo de capturar no me ganarás. ¡Adelante
Houndour!
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| Houndour del macarra |
-Ten cuidado Jorge. Los Houndour son de tipo Fuego-Siniestro y son
muy rápidos y sanguinarios.
-Entendido Hipo. Entonces seguiré con Spheal. ¡Pistola Agua!
-Houndour esquivar y Mordisco.
-Spheal Bola Hielo.
La pequeña foca esférica recubrió su piel de hielo. Houndour no
pudo atravesar esta capa con sus dientes.
-¡Aarg! ¡Houndour Lanzallamas!
-¡Spheal Pistola Agua!
El chorro de agua y el de fuego se estrellaron en una feroz
explosión. Varias rocas próximas estallaron. El polvo se disipó y Jorge no
perdió un segundo.
-Spheal Pistola Agua, otra vez- a Houndour le pilló por sorpresa y
fue refrescado con un buen chorro de agua- ¡Perfecto Spheal!
-¡Así se hace chicos!
-¡NO! ¡Mis pokémon!- el macarra cerró los puños enfadado por el
resultado del combate.
-Se siente. Vuelve Spheal, lo has hecho muy bien.
-¡¡Maldito enanoo!! ¡Esto no queda así! ¡Te la tengo jurada!- el
macarra abandonó la cueva por donde habían entrado Jorge e Hipotenusa. Incluso cuando
ya no se le veía, aún se le oía farfullar y también el sonido de sus cadenas.
Pero no había acabado todo en la Cueva Magma. Dos siluetas a lo lejos
estaban cazando pokémon como si de mariposas se tratase ajenos al combate que
allí se había producido. Se trataba de los ladrones Carla y Miguel.
-¡Eh! ¡Vosotros! ¡Dejadlos en paz!
-¡La pringamos Carla! El macarrailla ese no ha podido con ellos.
-¡Pues esta vez no voy a dejar aquí mi botin, querido!- Carla se
colocó su media melena rubia de bote y se colocó el sujetador finamente-
Adelante Misdreavus.
-Será mejor que mires la información el Pokédex Jorge. Ese pokémon
no lo habíamos visto.
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| Misdreavus de Carla |
-<<Misdreavus Pokémon de tipo Fantasma. Le gusta asustar a
los niños que van solos por la noche, aunque sólo lo hace por diversión propia.
Las perlas de su cuello son su fuente de poder>>
-Yo me encargo.
-No Jorge, tú acabas de combatir y tus pokémon necesitan decansar.
Yo me ocuparé de ella. Vamos Minun. Este será nuestro primer combate juntos.
El pokémon con las mejillas azules salió de su ball dando saltos
de júbilo.
-Demostremoles nuestro poder, querida. Misdreavus Psicorrayo.
Minun comenzó a correr por la cueva como una abuela cuando abren
las puertas en las rebajas.
-¡Que energía!- dijeron los cuatro al mismo tiempo mientras veian
al pokémon correr por todos lados sin descanso.
Mientras Minun se recorría toda la cueva, Miguel aprovechó para
seguir cogiendo pokémon. Justo en ese momento tenía un Cyndaquil agarrado por
una pata. Éste se resistía moviéndose sin parar.
-¡Eh!- Jorge no iba a permitir que se llevara a todos aquellos
pokémon- ¡Déjalos ahora mismo!
-¡Tú no vas a decirme lo que tengo que hacer!- Miguel empujó a
Jorge fuertemente, haciéndole caer al suelo. En ese momento, Cyndaquil mordió a
Miguel- ¡¡AAH!! - todos los pokémon que había en la gran red huyeron - ¡NO! ¡Volved
aquí!
-¡Pero que inútil eres, querido!
Carla y Miguel unieron fuerzas para luchar contra Jorge e Hipo. Minun
seguía correteando.
-Misdreavus para a ese bicho con
Rayo Confuso.
El fantasma iluminó sus ojos lanzando una extraña aura oscura a Minun,
que aún estando confuso y fuera de sí por los efectos, continuaba moviéndose a
gran velocidad por toda a cueva.
-Adelante Zangoose. Unámonos al combate.
-Adelante…- cuando Jorge se disponía a enviar a su Vigoroth, el
Cyndaquil de antes se le acercó y le indicó que él quería combatir. Estaba
claro que quería resarcirse por lo de antes- Está bien. ¿Qué ataques pueden
aprender lo de tipo fuego…? ¡Ya sé! ¡Cyndaquil Ascuas!
Las chispas de fuego provocaron que Zangoose tropezara y diera
varias vueltas de campana.
-Nos toca a nosotros Minun. ¡Onda Voltio!
El pequeño pokémon, desorientado, lanzó una gigantesca onda
eléctrica que afectó a todos los pokémon del combate y también a sus entrenadores,
que gritaron. Tras la descarga, Minun cayó debilitado agotado por todo el
esfuerzo realizado.
-¡¡Mi pelo!!- Carla sacó rápidamente un cepillo para arreglar
aquel estropicio.
-Vuelve Minun… Va a ser difícil controlarte… Electrike adelante.
-Regresa querida Misdreavus. Adelante Loudred, tu turno.
-Zangoose vuelve. Vamos Steelix.
-¡Cuidado!- los cuatro entrenadores y sus pokémon tuvieron que
tirarse a un lado y eludir las rocas desprendidas del techo por culpa del
desmesurado tamaño de Steelix.
-¡¡Por poco nos matas!!
-Lo siento Carla…
Mientras discutían, Jorge e Hipo se colocaron en torno a la Pokédex
para conocer algo más sobre aquel pokémon.
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| Steelix de Miguel |
-<<Steelix pokémon de tipo Tierra-Acero y evolución de Onix.
Se le conoce por su tendencia a cavar hacia el centro de la tierra. Hay datos
que muestran que este Pokémon ha llegado a alcanzar un kilómetro de profundidad
cavando>>
-Pues a mi no me da miedo. Electrike
Chispa a Loudred.
-Cynda Ascuas a Steelix.
Loudred fue tumbado envuelto en chispas mientras que los pequeños
rescoldos de fuego apenas surtieron efecto sobre Steelix debido a su tamaño.
-Steelix Cola Férrea.
-¡Electrike esquivar!
-¡Tú también Cyndaquil!
Loudred se estaba levantando cuando fue golpeado por la dura cola
de Steelix.
-¡¡Pero esto que es, querido!! ¡¡Que vamos en el mismo bando!!
-Jorge, esta puede ser nuestra oportunidad. Electrike Rayo a
Loudred.
-Cyndaquil Ataque Rápido.
Loudred se encontraba sin energías para continuar mientras que
Steelix continuó impasible.
-Loudred vuelve. Adelante querida Eevee.
-Steelix Lanzarrocas.
Eevee quedó fuera de combate tras ser golpeada con una de las
gigantescas piedras.
-¡¡¡Inutil!!! ¡Lo que le has hecho a mi Eevee no tiene precio!
¡Mala persona!
-Electrike Chispa.
-Cyndaquil Ascuas.
Steelix los echó abajo con su cola sin problemas- Ahora utiliza
Atadura.
El gigante intentó agarrar con su flexible cuerpo a los dos pokémon
pero éstos se le escurrieron.
-¡Querido! ¡Que se le han escapado!- Carla estaba con su Eevee en
brazos.
-Electrike Ataque Rápido a la cabeza.
-Cyndaquil Ascuas.
Steelix lo soportó con su gran defensa y Miguel le dio otra orden-
Atadura, una vez más.
Y como la vez anterior, Cyndaquil y Electrike eran demasiado
pequeños para él y consiguieron escaparse.
-Electrike Ataque Rápido con todas tus fuerzas.
-Cyndaquil tú también Ataque Rápido. ¡Vamos!
Los dos pokémon le golpearon en la mandibula desde abajo a Steelix,
que se desplomó con un gran estruendo que hizo eco por toda la cueva. Nuestros
amigos tuvieron que apartarse de su trayecoria.
-¡El Equipo Cirio acabará algún día con vosotros!- gritó Carla muy
enfadada. Jorge e Hipo soltaron una gran risotada al escucharla -¡Aarg!
Carla y Miguel huyeron de la cueva por donde se había marchado
antes el macarra.
-Equipo Cirio, no puedo dejar de reirme.
Los dos amigos continuaron su camino y tras poco tiempo andando
encontraron la salida.
-Bueno Cyndaquil aquí nos despedimos. Espero que sepas volver con
tus amigos- apuntó Hipo moviendo su mano de izquierda a derecha.
Sin
embargo, Cyndaquil no quería dejarlos y Jorge tampoco, se había encariñado con
aquel pokémon que además podría ser un gran pokémon de combates.
-No sé por qué pero creo que no nos despedimos.
-Ven con nosotros Cynda. Así te llamaré. Quiero entrenar contigo.
Cynda saltó a los brazos de Jorge. Estaba radiante y muy contento.
Jorge sacó una ball vacía y golpeó suavemente al pokémon.
-¡Bien, tengo un Cyndaquil!
