miércoles, 19 de enero de 2011

HISTORIA 1.0, Capitulo 25

¡¡Historia 1.0 Pokémon cumple 4 meses!! En Septiembre del pasado año incluíamos en Cenaculum de Alcorcon la primera Historia de Ficcion. En la actualidad, contamos con más de veinte capítulos y se encuentra entre las 5 entradas más leidas de nuestro blog. Además, pronto tendrá una “amiga”, una nueva Historia de Ficción para completar la este apartado de nuestro blog: Novedades 2011 en Cenaculum de Alcorcón
Para celebrar estos 4 mesecitos y vuestra fidelidad, ¿qué mejor que leyendo tres capítulos? Sí, has leido bien, tres nuevos capítulos. Deseamos premiaros por estar cada semana leyendo HISTORIA 1.0. Gracias a todos por seguirnos y a los que todavía no la han leido deseamos que disfrutéis cuanto antes con esta ficción tanto como  nosotros escribiéndola. Ojalá que continúe siendo de vuestro agrado durante mucho tiempo porque vosotros sois la base de Cenaculum de Alcorcón.

Capítulo 25: Regresando al camino; golpes de suerte en un día repleto de sucesos.


Con Carla ya recuperada casi dis meses después del suceso, los cinco jóvenes entrenadores retomaron el camino hacia la Liga Caroshm. Cada día que había pasado se habían unido más y más y ahora confiaban los unos en los otros.
Su próxima parada era Pueblo Canario. La ruta que unía Ciudad Hayedo y Pueblo Canario era el Camino Bicis. Pero como no tenían bicicletas para atravesarla, deberían dar un gran rodeo para llegar al pueblo.
Mientras los cinco entrenadores miraban en círculo el mapa, un hombre los asaltó.
-¡Hola, me llamo…!
-¡IIIAAA!
-¡La madre de dios!- todos se quedaron estupefactos cuando vieron a Carla hacer una llave y lanzar al suelo al hombre entrado en kilos por encima de su espalda.
-Yo solo quería daros algo…
-¡Uy! Perdone- Carla se llevó las manos a la boca- En las clases de defensa personal nos preparan para cualquier hecho imprevisto como este.
-Pues eso- el hombre se levantó con ayuda de los chicos- Mi nombre es Manolo y soy el dueño de la “Tienda de Bicis Manolo”. En unos minutos vamos a iniciar un sorteo de una bicicleta. Os doy un boleto a cada uno.
-Pero…- Jorge se dio cuenta de algo- si son todos los mismos números- Pero el hombre se había esfumado- ¡Qué velocidad se da para estar tan gordo!
-¿Vamos a la tienda a ver si nos toca, queridos?
-No caerá esa breva…
Los cinco jóvenes acudieron a la tienda que se encontraba en las afueras de Ciudad Hayedo. En la fachada había un gran cartel con la cara de Manolo y los grandes ventanales vislumbraban la cantidad de modelos que había dentro de la tienda, que poseía dos plantas.
-Buenos días a todos y gracias por venir a mi tienda, la mejor del país.
-¡Uf! Modestia aparte- señaló Jorge con ironia.
-Mi bellísima ayudante sacará los números del bombo.
A los tres chicos se les cayó la baba.
-¡Eh!- Hipo dio una colleja a cada uno de ellos.
-Que neandertales sois, queridos…- señaló Carla llevándose una mano a la frente, tapándose un poco los ojos.
-El uno- indicó la chica de joven edad con la bola en la mano.
-El numero ganador comienza por uno.
-Pues nosotros hemos acertado el primero. Ya estamos más cerca de las bicis.
-No vendas la piel del oso antes de cazarlo, querido.
-El nueve y el cero.
Hipo hincó las uñas a Jorge en el brazo.
-Me haces daño. ¿No decías que era poco probable que ganáramos?
-¡Eso era antes de ver que los tres primeros números coinciden!
-De todos modos, queridos, yo no podría pedalear. El médico me recomendó que evitara los deportes.
-El ocho y el nueve.
Hipo le hizo sangre a Jorge en el brazo.
-¡Ay!
-Lo siento, es que me pongo muy nerviosa con estas cosas.
-Pues que no me pille cerca la próxima vez…
-Y el último número es…- Manolo animaba el show- ¡el uno! ¡El número premiado es el diecinueve mil ochocientos noventa y uno!
-¡¡AAAAAAAHH!! ¡Es el nuestrooo!- nuestros amigos habían acertado en todos los números y dieron saltos y saltos de la alegría mientras el resto de participantes les miraban con cierta envidia.
-¿Cómo?- Manolo no se creía lo que oía. Su jugada le había salido por la culata.
-¿Qué ocurre? Una bici para cada uno, ¿no?
Manolo no tuvo más remedio que acceder- Está bien… podéis elegir las que queráis…- el dueño cabizbajo murmuró algo que no llegaron a escuchar- Menuda ruina de sorteo…
Jorge escogió una de color plateado. Hipo una amarilla brillante con un cesto delante. Una de montaña fue la opción de Raúl. Miguel prefirió escoger una que parecía un carro con toldo, para llevar a Carla.
Este golpe de suerte ayudó a nuestros amigos a estar más cerca de Pueblo Canario.
Sin embargo, un giro indebido de una ciclista provocó que se chocara contra Hipo. Ambas cayeron al suelo. Todos tuvieron que parar.
-¿Estás bien?- preguntó Jorge mientras la ayuda a levantarse.
-¿Estas ciega o qué, bonita?
-¿Perdona? ¡Pero si has sido tú la que te has cruzado de un carril  a otro en sentido contrario!- Hipo se levantó rápidamente tras oir aquella mentira.
-¡Pero que ordinaria!
-Pícame y te puedo soltar algo más ordinario.
-Hipo tranquila…
-Esto no queda así, osea. Te reto a un combate de un pokémon para que me devuelvas mi honor.
-Yo te lo devuelvo, que no lo quiero para nada- respondió Hipo gesticulando con las manos.
-Adelante “Spindi”- la chica, de la misma edad que ellos y muy pija, sacó su Spinda para combatir.
Spinda de la ciclista
-<<Spinda pokémon de Tipo Normal. Se le diferencia por los dibujos del pelaje, no hay dos Spinda iguales. Su forma de andar, inestable y torpe, logra confundir al enemigo y hacer que su puntería falle>>
-Vamos “Minim”- Hipo no pudo aguantarse e hizo el chiste fácil.
-“Spindi” Puño Mareo.
Spinda cargó de energía multicolor la mano cerrada y fue directa hacia su contrincante.
-Minun Chispa.
-Se nota que Minun es más fuerte. Él ha sido el victorioso de ese golpe.
-Tienes razón, querido.
-¡Ah! “Spindi” Psicorrayo.
-Minun esquívalo y Onda Voltio.
Spinda cayó de espaldas totalmente debilitado.
-Vaya… Qué pokémon tan débil…- murmuró Hipo mientras Minun daba varios saltitos lleno de energía.
-¡”Spindi”! ¡Osea, eres muy malaa!- la chica se fue corriendo con su pokémon.
-No si encima tendré yo la culpa, no te digo…
Pero los extraños encontronazos no habían acabado.
-Hola chicos. Parecéis entrenadores.
-Sí- respondieron los jóvenes un poco cortados y sorprendidos.
-Mi pokémon ha tenido muchos huevos y no puedo ocuparme de todos. Vosotros parecéis muy responsables.
Nuestros amigos no sabían muy bien que contestar. Raúl dio el paso.
-Yo me ocuparé de uno de los huevos.
-¿De verdad? ¡Muchas gracias!- la señora de aproximadamente cincuenta años le entregó el huevo pokémon a Raúl, que lo colocó en su mochila- Espero que lo cuides muy bien.
-¿Estás seguro Raúl?- murmuró Hipo para que solo le escuchara él- Que de ese huevo saldrá un pokémon.
-Ya lo sé, por eso lo tomo.
Cuando llegaron al final del Camino Bicis se toparon con algo que les llamó la atención.
-Esta es la casa del bayologo.
-¿Cómo lo sabes?
-Porque hay un cartel aquí que lo dice- Hipo lo señaló con la mano- También pone que regala bayas a quien le visita. ¿Entramos?
-Sí, ¿por qué no?
La pequeña casa de campo era de una sola planta. El jardín delantero contaba con un gran número de flores y pequeños arbustos decorativos. La madera de la fachada estaba ligeramente cubierta con una enredadera, que poseía también muchas flores.
-¿Hola? ¿Hay alguien?
-¡Bienvenidos! Hacía ya varios días que no me visitaba nadie. Ya solo por hacerme la visita os regalaré unas bayas- el bayologo tomó un pequeño saquito con diferentes bayas. Le entregó uno a cada uno de nuestros amigos.
-Muchas gracias.
-Pasad, pasad. Mi esposa ha preparado té y pastas.
-No querríamos molestar.
-¡No molestáis! Adoramos que jóvenes entrenadores como vosotros nos visiten y pasen un rato con nosotros contándonos sus aventuras.
Los cinco amigos aceptaron y se sentaron en torno a  una mesa cubierta con un mantel de ganchillo.
-Bienvenidos. ¿Os apetece una taza de té?
-Si no es molestia.
-Ninguna- la esposa del bayólogo, que peinaba canas al igual que su marido, sirvió el té en unas delicadas tazas de porcelana.
-Gracias.
-Bueno- el bayólogo tomó un sorbo- ¿os dirigís a Pueblo Canario?
-Sí. Nos pilla de paso hacia Ciudad Lucida. Allí desafiaré al líder de gimnasio.
Crobat del bayólogo
La conversación fue interrumpida por un gran estruendo que procedía del jardín trasero de la casa. Un chico atravesó una de las ventanas del salón, quedando inconsciente sobre la alfombra y los restos de la mesa de café. A continuación entró un Crobat perteneciente al bayologo.
-¿Qué ocurre?
-Creo que alguien ha entrado en el Huerto Prohibido. En ese lugar es donde tengo las bayas más raras y también algunas dañinas.
Los cinco amigos y el bayologo salieron por la puerta de atrás y se encontraron con varias personas, concretamente cuatro, acompañados con sus pokémon.
-¡Vosotros!
-Hola Carla. Vemos que te has recueprado muy pronto- respondió uno de ellos.
Gligar de uno de
los asaltantes
-¡Callate!
-Debeis ayudadme a proteger las bayas- indicó el bayologo muy preocupado.
-Nosotros le ayudaremos, no se preocupe.
Jorge fue el primero en enfrentarse a uno de los ladrones que poseía un Gligar.
-<<Gligar pokémon de tipo Tierra-Volador. Tiene la apariencia de un murciélago fusionado con un escorpión. Dicen que en algunos casos chupan la sangre a pokémon de campo>>
-Vamos Pidgeotto. Ataca con Golpe Aéreo.
-Gligar Ataque Arena.
La tierra lanzada por Gligar desestabilizó a Pidgeotto que derrapó por el terreno del jardín.
-¿Te encuentras bien Pidgeotto?
-Gligar Picotazo Venenoso.
-¡Pidgeotto alza el vuelo y Tornado!
Gligar y su entrenador acabaron entre unos arbustos espinosos recibiendo sus propias agujas tóxicas. Mientras Hipo ya había comenzado la lucha con una chica con unas pintas muy raras.
-Elekid golpea a Mawile con Puño Trueno.
Mawile de una de
las asaltantes
-¡Mawile! Ahora verás niñata, ¡Mawile Mordisco!
-¡Elekid Rayo!
Mawile recibió una gran descarga eléctrica, al tiempo que hicanab los dientes a Elekid. Aún así, Mawile fue la peor parada, quedando fuera de combate.
-Déjame a mi Carla. Adelante Steelix- Miguel se disponía a combatir frente a un hombre mayor que ellos se les acercó desafiante.
-Vamos Geodude.
-Steelix Cola Férrea.
Steelix lanzó a Geodude como si fuera un lanzamiento en baseball y su cola fuera un bate.
-Me toca. Adelante Wailmer- Raúl se lanzó a combatir con el último ladrón del Equipo Rock.
Trapinch de uno de
 los asaltantes
-Trapinch Mordisco- ordenó el maleante sin dudar.
-Wailmer Hidropulso- dolorido, Wailmer lanzó una onda acuática que dejó muy débil a Trapinch pero no lo suficiente para dejarlo fuera de combate.
-Trapinch golpea con Finta.
Aquel ataque ineludible bajó muchos las energías de Wailmer, un blanco demasiado fácil de acertar debido a su tamaño.
-Wailmer Desenrollar.
-¡Trapinch esquivar!
La ballena pequeña atravesó varios árboles y terminó empotrado contra una roca recubierta de musgo.
-Parece que Raúl está teniendo problemas con ese ladrón.
-No es un ladrón cualquiera, queridos. Ese era uno de mis Encargados.
-Trapinch es el momento de un Hiperrayo.
El pokémon del Encargado cargó energía para liberarla a continuación por su boca.
-¡No Wailmer!- Raúl temía el posible resultado de aquello pero enseguida observó que algo se había desencadenado. Wailmer fue engullido por un destello cegador- ¡Está evolucionando!
Wailmer se convirtió en un Wailor aumentando considerablemente en volumen y, en consecuencia, en poder.
Wailord de Raúl
-<<Wailord pokémon de tipo Agua y evolución de Wailmer. Es un pokémon cetáceo que es conocido como el pokémon más grande descubierto hasta ahora. Es muy pacífico y siempre está viajando en manadas en los grandes océanos>>
Wailord  machacó varios arbustos y tumbó árboles al no controlar su gigantesco tamaño. Todos tuvieron que dar varios pasos hacia atrás para no ser aplastados igual que las plantas de bayas.
-Ahora seguro que puedes utilizar algún nuevo ataque. ¡Adelante Wailord Salpicar!
El chorro de agua emitido por el orificio superior del cetaceo acabó de un golpe con Tranpinch y el Encargado, que huyeron junto con sus compañeros de fechorías, todos empapados.
Raúl se acercó a su recien evolucionado pokémon e intentó abrazarlo- Eres muy grande…

2 comentarios:

  1. Qué loco, cambiar un Horsea, con lo que mola Kingdra ._.

    ResponderEliminar
  2. pero es q en el Zoo ya tienen un kingdra y relicanth es más raro, es un pokemon antiguo!

    ResponderEliminar